En EOLISA LABORATORIOS, le ofrecemos los siguientes servicios:
Según lo indicado en el real decreto 3/2023, por el que se establecen los criterios sanitarios del control de calidad de aguas, su control y suministro, exigen nuevas especificaciones sanitarias y de control necesarias para la protección de la salud de los consumidores.
Ofrecemos la determinación de distintos parámetros microbiológicos no solo para verificar el cumplimiento de dicha normativa, sino también como garantía de calidad de sus productos, se incluyen parámetros como aerobios mesófilos a 22ºC, bacterias coliformes, colífagos somáticos, enterococos intestinales, C. perfringens, etc.
Entre los parámetros fisicoquímicos podemos destacar: antimonio, arsénico, benceno, benzopierno, cadmio, cobre, nitrato, nitritos, plaguicidas, trihalometanos, amonio, cloro, cloruro de vinilo, conductividad, pH, etc.
De acuerdo a lo establecido en el nuevo Real Decreto 3/2023 ofrecemos los diversos tipos de análisis que son exigidos:
– Análisis de Control Básico
– Análisis de Control Grifo
– Análisis Completo
– Análisis de Control de Radiactividad
– Análisis de Caracterización de Aguas
– Control Operacional
La Legionella es una bacteria ambiental capaz de sobrevivir en un amplio intervalo de condiciones físico-químicas. Su nicho ecológico natural son las aguas superficiales, pudiendo colonizar los sistemas de abastecimiento de las ciudades y, a través de la red de distribución de agua, se incorpora a los sistemas de agua sanitaria (fría o caliente) u otros sistemas que requieren agua para su funcionamiento.
Las instalaciones que con mayor frecuencia se encuentran contaminadas con Legionella son los sistemas de distribución de agua sanitaria, caliente y fría, los equipos de enfriamiento de agua evaporativos (torres de refrigeración, duchas, condensadores, etc.)
El Real Decreto 487/2022, que establece los criterios higiénicos para la prevención y el control de la legionelosis, obliga a toda empresa con responsabilidad de sus instalaciones de varios tipos de riesgo, según sean de agua caliente sanitaria, evaporadores, etc. a realizar una serie de controles y de análisis, determinando la calidad microbiológica (aerobios mesófilos a 22ºC y a 36ºC, coliformes, E. coli…) y fisicoquímica del agua (temperatura, pH, conductividad, sólidos en suspensión, nivel de cloro o biocida utilizado, productos de corrosión y parámetros microbiológicos) de torres de refrigeración y dispositivos análogos.
Para el análisis de Legionella se utilizan dos métodos:
– Método tradicional oficial, de cultivo en placa (Método ISO 11731), método largo (incubación a 10 días) y precisa de un volumen de al menos 1 litro de muestra.
– Método de identificación de especies por ADN (técnica PCR), es sensible y rápido y necesita un volumen menor de muestra.
El control de agua residual industrial y municipal viene recogido en distintas normativas tanto europeas como nacionales, como la Directiva 91/271/CEE sobre el tratamiento de aguas residuales urbanas a través del Real Decreto 509/1996, por el que se establecen las normas aplicables al tratamiento de las aguas residuales urbanas, el cual en su artículo 4º señala la necesidad de conocer el valor medio diario de la carga orgánica biodegradable correspondiente a la semana de máxima carga para el diseño de las instalaciones de tratamiento y depuración de aguas residuales.
Disponemos, además de la recogida manual de agua residual, de toma-muestras automáticos para la realización de caracterizaciones de vertido, los cuales pueden coger muestras en periodos de 24 horas.
Es fundamental ya que certifica que los alimentos que comen los animales cumplen todos los requisitos exigidos. Realizamos análisis microbiológicos para determinar parámetros indicadores (aerobios mesófilos, enterobacterias, mohos y levaduras, coliformes totales, coliformes fecales, estreptococos, microorganismos esporulados, psicotróficos, bacterias lácticas, aerobios termófilos, anaerobios, anaerobios sulfito reductores) y microorganismos patógenos (Bacillus cereus, Clostridium perfringens, Escherichia coli, Staphylococcus aureus, Salmonella spp, Campylobacter jejuni, Listeria monocytogenes, Pseudomona aeruginosa).
También se realizan análisis bromatológicos que determinan la composición mayoritaria del pienso y materia prima: humedad, aw, grasa, proteína, proteína digestible, cenizas, hidratos de carbono, fibra bruta, fibra acido detergente, lignina, almidón, composición de azucares, etc.
Por otro lado, realizamos análisis de sustancias indeseables en piensos para cumplir con la legislación vigente analizando si hay presencia de sustancias como: plaguicidas organoclorados y organofosforados, metales pesados, micotoxinas, PCB’s, dioxinas, antibióticos…
La importancia de realizar un estudio completo sobre la composición de los piensos radica no solo en definir completamente su valor alimenticio, sino también en poder determinar la presencia de granos tóxicos, mohos, insectos, residuos o de la presencia de algunas harinas no deseables, como, por ejemplo, la presencia de determinadas harinas cárnicas y su limitación para el uso en piensos para animales de granja.
Ofrecemos la posibilidad de conocer la composición de sus piensos, mediante técnicas de micrografía.
Es muy importante conocer la composición cualitativa de determinados piensos y materias primas, para verificar la posible adulteración.
Las micotoxinas son metabolitos secundarios tóxicos producidos por ciertas especies de hongos (Penicillum, Fusarium…) al final de la fase de crecimiento, cuando han infestado productos agrícolas especialmente del tipo de los cereales o los frutos secos.
Entre las micotoxinas se encuentran las Aflatoxinas, Ocratoxinas A y B, Deoxinivalenol o Vomitoxina, Toxina T-2, Toxina HT-2, Zearalenona, Fumonisinas y Aflatoxina M1 en la leche.
Podemos ofrecer distintos análisis de estas sustancias:
– Análisis de Aflatoxinas B1, B2, G1, G2 acreditado por cromatografía líquida con detector de fluorescencia
– Análisis express: Resultados en 24 horas. Se realiza por inmunoensayo.
– Análisis urgente: Resultados entre 3-7 días tras la recepción de la muestra. Se realiza por ELISA.
– Análisis por HPLC: Resultados entre 7-10 días tras la recepción de la muestra. Se realiza por
Cromatografía de Líquidos con detector de Masas de triple Cuadrupolo (LC-MS/MS), que permite además hacer un barrido de hasta 11 micotoxinas simultáneas.
Las vitaminas son sustancias orgánicas imprescindibles en los procesos metabólicos que tienen lugar en la nutrición de los seres vivos. Las vitaminas deben ser aportadas a través de la alimentación. En alimentos en general, alimentos funcionales, multivitamínicos y correctores de piensos, las cantidades de ciertas vitaminas suelen ser muy bajas, lo cual, imposibilita el uso de técnicas analíticas tradicionales para su determinación.
Los antibióticos son sustancias químicas producidas por organismos vivientes, capaces de inhibir en pequeñas cantidades los procesos vitales de ciertos microorganismos, destruyendo e impidiendo su desarrollo y reproducción.
La mayor parte de los antibióticos utilizados en clínicas, son producidos por microorganismos u hongos del suelo.
Ofrecemos la posibilidad de realizar la determinación de vitaminas del grupo B mediante bioensayos, y de antibióticos, mediante ensayos de inhibición por turbidimetría o difusión en agar.
Algunos de los análisis que realizamos serían:
– Análisis de suelos que resultan de gran utilidad para poder estudiar la estructura y composición del suelo, como los parámetros que influyen en la productividad y fertilidad de los cultivos (pH, conductividad, materia orgánica, caliza activa, NPK asimilables, Capacidad Intercambio Catiónico, etc. Y también podemos analizar la presencia de contaminantes en el suelo como metales pesados, restos de productos fitosanitarios…
– Análisis de fertilizantes (análisis del abono utilizado) nos sirven para determinar la composición y porcentajes de los elementos que forman el mismo (nitrógeno, potasio total, metales pesados, pH, sodio, calcio, sulfatos, cloruros…).
– Análisis foliares que nos van a indicar las carencias que tiene un cultivo debido a la falta de nutrientes de un suelo.
– Análisis de residuos de productos fitosanitarios y otros vertidos o elementos presentes en cultivos, plantas, suelos, alimentos, piensos, aguas y demás factores que afecten al correcto desarrollo de la producción.
– Análisis de gasóleos para verificar el cumplimiento de la legislación vigente en esta materia, lo que permite conocer la naturaleza, composición y aditivos que lleva y con ello poder saber la calidad del mismo y así realizar un correcto uso.
– Análisis de semillas, es decir, sobre la composición de los diferentes granos, muy útil en trigos harineros, así como en semillas de girasol y colza.
Los plaguicidas son sustancias químicas que se utilizan para el control de plagas. Existen muchas familias: organoclorados, organofosforados, piretrinas, carbamatos, ditiocarbamatos, herbicidas, fungicidas…
Los análisis se realizan con técnicas especializadas: cromatografía de gases con detector FID, ECD O NPD y Masas; y cromatografía líquida con diversos detectores.
El objetivo es determinar que el residuo de plaguicida no sobrepase el Límite Máximo de Residuo (LMR) indicado en el Reglamento 396/2005 relativo a los límites máximos de residuos de plaguicidas en alimentos y piensos de origen vegetal y animal.
Los análisis a realizar se pueden encuadrar entre los parámetros que indican condiciones de elaboración deficientes de limpieza, microorganismos que deterioran el producto, así como de microorganismos patógenos para el consumidor.
– La determinación de parámetros indicadores incluye el análisis de aerobios mesófilos, enterobacterias, mohos y levaduras, coliformes totales, coliformes fecales, estreptococos, microorganismos esporulados, psicotróficos, bacterias lácticas, aerobios termófilos, anaerobios, anaerobios sulfito reductores, etc.
– La determinación de microorganismos patógenos, como Clostridium perfringens, Escherichia coli, Staphylococcus aureus, Campylobacter jejuni, Listeria monocytogenes, Legionella pneumóphila, Bacillus cereus, Salmonella spp, Pseudomonas aeruginosa, Candida albicans, etc.
Las diversas Reglamentaciones exigen que la información facilitada al consumidor se encuentre bien etiquetada. Esta información se recoge en el denominado “Etiquetado Nutricional” regulada por el Reglamento 1169/2011, con el objetivo de perseguir un alto nivel de protección de la salud de los consumidores y garantizar su derecho a la información para que puedan tomar decisiones de compra en relación a sus necesidades.
Ofrecemos la determinación de los distintos parámetros que establece la legislación, no solo pare verificar su cumplimiento, sino también como garantía de calidad de sus productos.
El análisis nutricional determina la composición mayoritaria del alimento: Valor energético, agua (humedad, extracto seco), grasa, proteína, cenizas, hidratos de carbono, fibra, azúcares, polialcoholes, almidón, sal, calcio, vitaminas, etc.
En ocasiones, también es necesario determinar otro tipo de parámetros más específicos como fibra alimentaria total, soluble e insoluble, almidón, cloruros, fósforo, calcio, ácidos grasos saturados e insaturados, colesterol, esteroles, vitaminas liposolubles (A, D, E…) e hidrosolubles (Vit. C, Grupo B), identificación del tipo de azúcar (glucosa, sacarosa…)
También podemos ofrecer la detección de componentes como metanol, impurezas volátiles en bebidas alcohólicas, detección de metales pesados en alimentos y piensos, aminoácidos totales e individuales.
Ofrecemos también la posibilidad de determinar de forma acreditada el nutricional completo con fibra en Alimentos como se refleja en el expediente 552/LE1333, para cumplir con las exigencias del Reglamento 1169/2011 sobre la información alimentaria facilitada al consumidor.
Los controles de calidad sensoriales de los productos se basan en testar el grado de satisfacción de los consumidores, realizando mediante sistemas de test de productos, según las necesidades de información a obtener. Este análisis proporciona información muy útil a la hora de desarrollar nuevos productos, conocer las necesidades y apetencias de los consumidores y sobre todo no equivocarse con la evaluación de la satisfacción del producto elaborado.
El control del análisis sensorial lo realizamos mediante diversos sistemas:
– Test de consumidores normal y multigeográfico: Mide el grado de satisfacción que el consumidor tiene de un producto con una elevada exactitud. Se realiza en diferentes localidades con un perfil adecuado de consumidores. Se valora la intención de compra frente a los de la competencia, testar el tipo de envase, formato, o incluso la aceptación de nuevo desarrollo. El número de personas a testar es un dato importante que influye en los resultados estadísticos y puede elegirlo el cliente.
– Test de sondeo de consumidores: Mide el grado de satisfacción que el consumidor tiene de un determinado producto. La prueba se realiza con al menos 30 personas elegidas con un perfil definido (edad, sexo, hábitos de consumo, etc.). Con ello, se consigue testar el producto frente a la competencia, conocer más del tipo de envase, formato, intención de compra y aceptación del nuevo producto.
– Otros servicios: Test de discusión en Grupo (Focus-group), Prueba triangular, Test de packaging, Formación y asesoramiento en análisis sensorial, Selección y entrenamiento de paneles internos de cata.
La Comisión Europea mediante la publicación de distintos Reglamentos establece la lista positiva de colorantes, edulcorantes y otros aditivos para su uso en la elaboración de productos alimentarios, así como sus condiciones de utilización.
Ofrecemos la cuantificación de aditivos, no sólo para la verificación del cumplimiento de la normativa vigente, sino también como garantía de calidad de sus productos.
Entre los aditivos destacan los conservantes: sulfitos, nitrato y nitrito, ácido sórbico, sorbato potásico… antioxidantes: BHT, BHA, vit. C, Ac. Cítrico… colorantes: curcumina, riboflavina, tartrazina, eritrosina, β-caroteno… edulcorantes: sacarina, aspartamo, acesulfamo k, eritrol… humectantes: glicoles, propilenglicol…
Una pequeña parte de la población pude sufrir reacciones adversas ante el consumo de ciertos alimentos, a pesar de encontrarse en buen estado, es lo que se denomina: Intolerancias o Alergias.
En el caso de las alergias, la exposición al alérgeno activa el sistema inmunológico del afectado desencadenando una serie de reacciones que dan lugar a síntomas de diferente índole como reacciones cutáneas o trastornos respiratorios.
Las intolerancias se deben a dificultades para metabolizar ciertas sustancias. En ocasiones se puede deber a que el organismo no produce correctamente alguna enzima necesaria para el metabolismo de la sustancia en cuestión.
El Reglamento 1169/2011 sobre la información facilitada al consumidor recoge 14 alérgenos de obligada declaración, por tanto, las empresas alimentarias deben identificar todos los alérgenos presentes en sus productos para poder gestionarlos de tal manera que no hay ningún riesgo para el consumidor.
Ofrecemos a los clientes el control de análisis de alérgenos mediante varias técnicas. Las más comunes son técnicas de PCR (detección de ADN del alérgeno) o técnicas ELISA (técnicas de inmunoensayo basadas en reacciones antígeno-anticuerpo).
La detección cualitativa y cuantitativa de organismos genéticamente modificados (OMG’s), en productos de consumo humano y animal, pretende determinar el grado de cumplimiento de la Directiva 2001/18/CE sobre la liberación intencional en el medio ambiente de organismos modificados genéticamente.
También se verifica el cumplimiento del Reglamento CE/1829/2003 relativo a la indicación obligatoria en el etiquetado de determinados productos alimenticios fabricados a partir de organismos modificados genéticamente.
El análisis consiste en una técnica de Biología molecular consistente en una PCR. También se pueden realizar análisis cualitativos y cuantitativos de la presencia de un determinado gen transgénico y con ello verificar el cumplimiento de los límites establecidos legalmente sobre la obligación o no de su etiquetado; aunque también puede servir como control de calidad para verificar la ausencia de restos de algún alérgeno.
